¿Qué ves en un atardecer?

Por: Cristina Olimpia Natera

La madre naturaleza nos regala distintos fenómenos durante el día que no muchos saben apreciar. Días realmente soleados y/o una que otra nube o “borreguitos”, como mi abuelito les llamaba; o aquellos en dónde el cielo amanece cubierto por un manto blanco dejando caer una brisa fresca matinal.

Pero existe uno de ellos que, de manera personal es mi favorito, el atardecer. Aquella conjugación de colores que en el horizonte deja apreciarse y el cuál nos da a entender que el día está por terminar.

Después de un día soleado o medio nublado, cuando el sol está por esconderse y dar paso al brillo que comparte a la Luna, planetas y estrellas cercanas, su salida se convierte en todo un panorama espectacular, pintando al cielo de los mejores colores que en cualquier estación pueden apreciarse.

La luz del Sol es de color blanco (combinación de todos los colores), pero al momento de ponerse, los tonos que predominan son el rojo, naranja y amarillo, pues los demás se dispersan y son más difíciles de apreciar por el ojo humano. Así pues, al encontrarse con las nubes que vagan por esa dirección, convierten al ocaso en un escenario de fuego, jugando así con los últimos rayos del sol, dejando una vista indudablemente maravillosa.

Aquella imagen que sin lugar a dudas y sin ser manipulada por el hombre genera tranquilidad y a su vez fascinación, dando a entender que nuestra Tierra es rica en belleza natural y que cada día nos regala un panorama diferente.

La Revista de Arena

"La arena como el tiempo es infinita y el tiempo como la arena borrará mis huellas y perderá mi rastro"